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La eficiencia energética tiene el objetivo de disminuir la energía que se necesita para que funcionen los aparatos eléctricos o se realicen unos productos o servicios. En la cocina, la eficiencia energética está muy presente, gracias a ella los consumidores pagarán menos en sus facturas de la luz y del gas. Te lo contamos a continuación en este artículo.

 ¿Cómo ahorrar en tus facturas?

Si queremos reducir nuestro gasto energético y que ello se refleje en nuestras facturas, tendremos que revisar si hemos contratado las tarifas adecuadas para ello. Por ejemplo, si centramos nuestro consumo en horas particulares, una tarifa de luz de discriminación horaria nos podría resultar muy rentable. El precio de la luz por horas significa que el kWh es más barato en una franja horaria concreta, normalmente, las horas nocturnas. En concreto, la discriminación horaria tradicional tiene el precio de la luz por horas más barato en verano de 23:00 a 13:00 y en invierno de 22:00 a 12:00. Si no te conviene esta modalidad, puedes optar por una que tenga el precio del kWh estable.

Por otro lado, si acabas de mudarte a una nueva vivienda puede que tengas que activar los suministros e informarte de cuánto cuesta dar de alta la luz y el gas. En el caso del primero, dependerá de la potencia contratada y de los kW; mientras que para el gas influye la Comunidad Autónoma donde se encuentre el suministro y la tarifa de acceso que se necesite. Si te preguntas cuánto cuesta dar de alta el gas, no hay un precio exacto por estos factores que te acabamos de mencionar, pero en general son 200 euros aproximadamente por cada suministro (en una vivienda).

 ¿Cómo ser más eficiente en la cocina?

Aquí te damos unos cuantos ejemplos para mejorar la eficiencia energética de la cocina:

  • Luces LED: en la cocina también se pueden instalar luces LED, que consumen un 80% menos de energía que las bombillas tradicionales.
  • Electrodomésticos eficientes: asimismo, a la hora de comprar electrodomésticos es conveniente apostar por aquellos que tengan una etiqueta de eficiencia energética alta (letra A). Esto quiere decir que consumirán menos energía por el mismo trabajo.
  • Cocinar con olla express y tapas: por otro lado, en el cocinado también se puede reducir el gasto energético utilizando tapas u ollas express, aquí encontrarás más información sobre ello. De esta forma, el plato estará listo más rápido porque el calor y la energía no se escapará.

  • Lavadora y lavavajillas en programas fríos: es el momento de cambiar de programas en tu lavadora y lavavajillas y elegir aquellos que usan agua fría. Así nos ahorraremos la energía que usamos para calentar el agua.
  • Mantener la temperatura de la nevera estable: la nevera es el único electrodoméstico que funciona las 24 horas, pero también existen trucos para que no consuma en exceso. En concreto, mantener su temperatura en 4º, mientras que para el congelador se aconseja 18º.